¿Cómo los productos inteligentes y conectados están transformada la industria?

Los dispositivos inteligentes han sido sinónimo de todo lo que se encuentra conectado a una red. Pero es más que solo la habilidad de permitir la conexión de un dispositivo a Internet lo que lo hace inteligente. Es una combinación de servicios, confianza y facilidad lo que permite que sean una mejor opción para un consumidor.

La idea del Internet de las Cosas (IoT) es que el Internet trascienda la barrera de las pantallas (computadoras, smartphones, tablets, televisores) hacia un mundo hiperconectado en el que los objetos cotidianos también pasen por la red. Se trata, en efecto, de una evolución natural hacia la digitalización. En los últimos años, los objetos conectados están creciendo exponencialmente, y las previsiones son de un crecimiento aún mayor. Sin embargo, es fundamental tener dispositivos equipados con el hardware necesario para conectarse a Internet y una infraestructura de telecomunicaciones que los soporte.

El IoT no se trata de las cosas, sino de los servicios que puede ofrecer con esas cosas. Un dispositivo inteligente debe hacer uso del efecto de red para servicios más complejos. Con más datos viene más poder, y saber cómo aprovechar esos datos para mayor beneficio es fundamental. Además, de las capacidades primarias de un dispositivo y los servicios correspondientes, ganar y mantener la confianza es esencial para un producto IoT. Para que un dispositivo sea una inversión inteligente para las personas, los consumidores deben poder confiar en que un dispositivo tendrá un soporte el tiempo suficiente para garantizar el costo adicional. Por último, para que un dispositivo sea realmente inteligente, debe ser fácil de usar.

Los productos inteligentes y la industria

Los productos han tenido una revolución gracias a la tecnología de la información. Ya que se ha convertido en combinaciones complejas de hardware, sensores, almacenamiento de datos, microprocesadores, software y conectividad en diferentes formas. Estos productos inteligentes han traído una nueva era en la competencia. Estos nuevos tipos de productos están alterados la estructura de la industria y la naturaleza de la competencia, exponiendo compañías para las nuevas oportunidades de competencia.

Los dispositivos inteligentes han surgido para reflejar los crecientes números de productos inteligentes, conectados y poner de relieve las nuevas oportunidades que puedan llegar a representar. Y es que el internet ya sea trate de personas o cosas es simplemente un mecanismo para transmitir información, lo que hace que un producto sea inteligente no es el internet en sí, es su naturaleza cambiante de las cosas.

Los productos inteligentes conectado tiene tres elementos básicos:

Componentes físicos: estos comprenden partes mecánicas y eléctricas. En un carro, por ejemplo incluye el motor, las llantas y la batería

Componentes inteligentes: comprenden los sensores, microprocesadores, almacenamiento de datos, controles, software, por lo general un sistema operativo incorporado e interfaz de usuario de mejora. En un carro, por ejemplo, los componentes incluyen la unidad de control del motor, el sistema de frenos, el sensor de lluvia de limpiaparabrisas, y pantallas.

Componente de conectividad: comprenden antenas y protocolo que permiten la conexión con el producto. La conectividad toma 3 formas: a) Uno a uno, en la cual un producto individual que conecta con el usuario, el producto u otro producto a través de un puerto u otra interfaz. b) Uno a varios, en donde un sistema central es continuo o intermitentemente conectado a varios productos simultáneamente. d)Varios a varios, múltiples productos conectados a varios otros tipos de productos y otras fuentes externas de datos.

Reflexion final

En los próximos años se espera poder conectar a la red cualquier cosa que te plantees conectar. Un ejemplo de cómo nos puede ayudar el IoT en nuestra vida diaria es, ir en un vehículo a una reunión con un cliente haciendo uso del GPS, y que este te lleva por la mejor ruta, pero en caso de tráfico denso, nuestro GPS se podría comunicar con nuestro cliente vía WhatsApp avisándole del retraso debido al tráfico.

Nuestros dispositivos inteligentes van a interactuar a un ritmo creciente con nuestro entorno, y se enriquecerán con sensores que ni siquiera van a ser visibles a simple vista. Estos proporcionaran a nuestros dispositivos móviles información valiosa y actuaran en nuestro nombre cuando se acceda a aplicaciones, con lo que se nos ayudaran a ahorrar tiempo en lugar de hacerlo manualmente. Incluso, las tecnologías del IoT harán que la vida de los profesionales sea más fácil en muchos niveles. Algunos afirman que, literalmente, todos los negocios se verán afectados durante las próximas tres décadas. Todo esto va a obligar a los trabajadores a adaptarse a los nuevos entornos y estándares en la práctica empresarial.

Esta nueva era cambiara la forma en que los fabricantes y empresas de servicios interactúan con los clientes. Hoy en día una compañía vende un producto y espera a saber si es que hubo un problema con este en unos días. Por tanto, tienen cierta dependencia de los Call Centers o los departamentos de servicio al cliente. Con el IoT esto cambiara profundamente, pues muchos productos estarán conectados directamente a un servicio de evolución de su estado. Además, pueden ayudar a hacer diagnósticos y análisis sobre su uso, y mejorar futuros desarrollos para satisfacer mejor las necesidades de los usuarios.

Bibliografía

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